Lo bueno, lo malo y lo feo del Clausura 2019
La séptima estrella de Tigres llegó después de que vencieran por 1-0 global a León la noche de ayer. Después de cinco meses de competencia el Clausura 2019 tuvo su fin, por lo que hoy queremos hacer un recuento de las cosas buenas y no tan buenas que nos dejó el torneo:
Lo bueno
La temporada del León
Los Panzas Verdes perdieron la final pero en el recuerdo quedará su gran temporada. Un récord de victorias para el futbol mexicano, el mejor anotador y un futbol vistoso fue el que nos dejaron, aunque en el momento clave no lograron cerrar con broche de oro.
El título de goleo muy peleado
Ángel Mena fue el mejor goleador del Clausura 2019, pero vivió una dura batalla contra Milton Caraglio, Brian Fernández y Rogelio Funes Mori. El ecuatoriano finalmente consiguió el trofeo con 14 títulos, pero fue bueno ver a tantos grandes delanteros peleando por él.
Lo malo
El bajo nivel del torneo
El Clausura 2019 ha sido uno de los torneos con más bajo nivel de los últimos años. Fuera de León y Tigres, los dos finalistas, el nivel de los equipos fue bastante mediocre, con varios de ellos solamente navegando a media tabla sin verdadera posibilidad de luchar.
Los grandes no aparecen
América no fue un equipo dominante y se quedó en semifinal; Cruz Azul no pudo pasar de cuartos y Pumas y Chivas no calificaron. Los llamados grandes de la Liga MX decepcionaron este año, y equipos como Tigres desafían esa etiqueta de grandeza en el futbol mexicano.
Lo feo
La polémica del Veracruz
Uno de los temas del torneo fue el mal manejo de los Tiburones Rojos. El equipo del Puerto fue el primero en terminar con 0 puntos, descendiendo y dejando varias imágenes lamentables. Al final pagaron los 120 millones de pesos para permanecer en Primera, pero nadie sabe qué nos espera con ellos el siguiente torneo.
La liguilla
Para muchos esta fue la peor liguilla desde la del Clausura 2006 cuando Pachuca venció a San Luis. Partidos sin muchas emociones, pocos goles y sólo cinco goles en los seis partidos de semifinales y final hacen pensar que quizá es momento de que los torneos largos regresen a nuestro futbol.