El Cold Call en el póker se trata de igualar una apuesta y una subida en la misma ronda, sin haber realizado ninguna apuesta ni subida previa.
En otras palabras, el jugador que realiza un Cold Call iguala, tanto la apuesta inicial como la subida realizada por otro jugador, sin haber apostado él mismo en esa ronda.
Si un jugador realiza un Cold Call, esto significa que está dispuesto a invertir una cantidad significativa de fichas sin haber mostrado fuerza previa en la mano.
A continuación te explicamos más detalles de esta táctica de póker.
¿Cuándo es bueno el Cold Call en el Póker?
Hacer un Cold Call es para los más aventureros a la hora de jugar póker, así que si quieres ser uno de ellos, pon mucha atención a lo siguiente para que lo hagas de la mejor manera.
- Cuando se tiene una mano fuerte.
- Hay una posición sobre el apostador.
- Existen buenas probabilidades de ganar.
1. Cuando se tiene una mano fuerte
Recuerda que el Cold Call también puede ser utilizado como una estrategia de juego para tratar de engañar a los oponentes y hacerles pensar que tienes una mano débil, cuando en realidad tienes una mano muy fuerte.
Si tienes una mano fuerte, como un par alto o una mano de escalera, y crees que tus oponentes también tienen buenas manos, entonces puede ser una buena idea hacer un Cold Call en el póker para intentar ganar el bote.
2. Hay una buena posición sobre el apostador
El Cold Call es una jugada arriesgada en el póker, por lo que te recomendamos utilizarla con precaución y sólo en situaciones específicas en las que se tenga una buena oportunidad de ganar el bote.
Si estás en una posición de ventaja sobre el jugador que realizó la apuesta, como estar sentado a su derecha, puedes tener una mejor idea de la fuerza de su mano.
Por otro lado, si crees que el jugador que realizó la subida tiene una mano débil, entonces puede ser apropiado hacer un Cold Call para intentar ganar el bote.
3. Existen buenas probabilidades de ganar
Cuando crees que tienes buenas probabilidades de ganar el bote de apuesta, como cuando tienes una mano de proyecto o crees que se puede hacer una lectura precisa de la mano del oponente, entonces puede ser una estrategia efectiva para ganar.
En general, es importante evaluar cuidadosamente la situación antes de hacer un Cold Call en el póker, porque si se hace correctamente, puede ser una jugada poderosa que puede ayudar a ganar botes importantes; pero si se utiliza de manera imprudente, puede llevar a pérdidas significativas de fichas.
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