Desde el origen de los casinos, muchas personas fantasean con la posibilidad de ganar una fortuna, pero, aunque esto sí pasa, no es algo que se vea todos los días. Lo que sí es que hay varios personajes que se las han ingeniado con trucos o con pura habilidad y suerte, para llevarse sorprendentes cantidades de dinero a casa. Pese a que varios de ellos perdieron sus ganancias del mismo modo, hay que admitir que sus historias son dignas de ser contadas.
¡Ojo! Las historias que leerás a continuación son casos aislados y nuestro objetivo es ilustrar sobre el tema. Evita imitarlos, recuerda que para jugar responsablemente debes apostar cantidades que entren en tu presupuesto.
Charles Wells (Broxbourne, Inglaterra, 1841-1922)
En 1891 Charles visitó al casino de Monte Carlo con 4 mil libras en el bolsillo y ganó 60 mil libras (lo que actualmente equivale a 6 millones de libras, casi 150 millones de pesos y que en ese entonces era muchísimo dinero), dejando “en ceros” al banco del casino. Cuando sucedía esto la mesa en cuestión era cubierta con un paño negro hasta que trajeran los fondos para pagar al afortunado apostador y se decía que habían “quebrado al banco”.
Muchos se cuestionaban cómo es que Charles Wells había logrado ganar tanto y él argumentaba que su suerte se debía a un método para los juegos que logró perfeccionar. Esto no evitó que varios medios aseguraran que se trataba de un simple truco para darle publicidad al casino. A pesar de eso, la historia de Charles Wells fue tan popular que se convirtió en la inspiración de “The man who broke the bank of Monte Carlo”, una canción británica que fue popularizada cuando el cantante y comediante Charles Coborn la interpretó.
Stu Ungar (Nueva York, 1953-1998)
En 1980 jugó su primer World Series Of Poker –el torneo de poker más popular y prestigioso en el mundo– tenía sólo 24 años. Después, repitió su hazaña en 1981 y luego en 1997, un año antes de morir.
Su capacidad para crear estrategias y realizar jugadas era tan rápida como eficaz, por lo que sorprendió a muchos. Incluso él se llamaba a sí mismo “monstruo”, pues alardeaba de que era capaz de ganarle a quienes llevaban décadas jugando algo que él apenas había aprendido hace poco.
Pese a su gran talento, Stu se confió de más y continúo jugando incluso cuando debió de haberse detenido. Se convirtió en un apostador compulsivo y se calcula que ganó y perdió aproximadamente 30 millones de dólares a lo largo de sus años de juegos antes de morir a los 45 años.
Archie Karas (Antipata, Grecia, 1950)
“El Griego” descubrió a una edad temprana que tenía talento para las cartas, pero eso no evitó que su vida se llenara de altas y bajas en el mundo de las apuestas. Tras haber amasado una fortuna, Archie siguió apostando hasta quedar en la ruina. Aún así decidió darse una nueva oportunidad, por lo que en 1991 pidió prestados 10 mil dólares a un amigo y se fue a Las Vegas, donde se sentó en una mesa de poker y ganó numerosas veces hasta acumular 4 millones de dólares.
La noticia se dispersó como polvo en el viento y pronto grandes jugadores del poker como Stu Ungar, lo retaron con la intención de ganar “dinero fácil”, pero fallaron en el intento y le ayudaron a Karas a incrementar sus ganancias.
Después de una laaaaarga racha de buena suerte, ésta se fue desvaneciendo. Luego de tomarse un merecido descanso, regresó a los casinos en donde perdió los 12 millones de dólares que le quedaban.
Gonzalo Garcia-Pelayo (Madrid, 1947)
Este peculiar personaje tiene experiencia dentro de varias industrias: ha sido locutor de radio, productor musical, conductor de televisión y hasta director de cine, pero también realiza apuestas deportivas y se las ingenia para ganar dinero en los casinos.
Según Pelayo, todas las ruletas tenían una imperfección física que provocaba que unos números salieran más que otros y, con base en esto, realizó múltiples pruebas y recolectó datos de un montón de ruletas de varios casinos. Luego los introdujo en un software con la intención de obtener estadísticas útiles para elegir el número con la mayor probabilidad a salir.
Pelayo no hizo todo esto solo, sino que recibió bastante ayuda de sus hijos y todo este complejo sistema pasó a ser un “negocio familiar”. Sin embargo, cabe destacar que esta acción es considerada como un acto fraudulento que rompe con el espíritu del juego de la ruleta.
Tras las acciones de Pelayo, los casinos tomaron las medidas necesarias (como perfeccionar sus ruletas), para que ningún otro jugador pueda usar trucos similares. Afortunadamente esto no fue ni será posible en las ruletas en línea, debido a que los softwares de los sitios confiables como Strendus son imposibles de hackear.
Vanessa Selbst (Nueva York, 1984)
Fue conocida internacionalmente como una de los mejores jugadores de poker. Es la única mujer que ha alcanzado el puesto número uno en el ranking Global Poker Index.
Cuenta con tres brazaletes del World Series of Poker y ha llegado a la tabla final en dicho concurso otras ocho veces. Además, se registró que las ganancias de los torneos en vivo de Vanessa superaron los 11 mil 800 millones de dólares hace un par de años.
Estudió la carrera de Ciencias Políticas en la prestigiosa MIT, por lo que nunca fue jugadora de tiempo completo (sabia decisión). Hace apenas un año anunció su retiro del mundo de las apuestas y ahora es la nueva «Loba de Wall Street«.
Para que tú también dejes huella en este mundo, pero de una manera positiva, siente la adrenalina en Strendus respetando siempre tu presupuesto y aprovecha nuestros demos cuantas veces quieras para perfeccionar tus técnicas en el juego.